MANIFESTACIONES INDIGNAS DEL PRIMER MANDATARIO

Néstor Kirchner ha hecho manifestaciones indignas de un presidente de una República democrática.
Con una prepotencia que le es propia pero impropia de su investidura instiga a la violación total del derecho en la Argentina.
Con un discurso que cada vez se asemeja más a la escuela castrista - chavista, insulta y ofende no solo a las personas sino a las sagradas instituciones del país.
Los argentinos no debemos dejar pasar por alto este hecho, podemos pensar distinto o igual pero no podemos permitir que se avasalle la Justicia.
Todos sabemos que no es perfecta pero es preferible con todas sus imperfecciones a que no exista.
Su existencia está garantizando la existencia misma de la libertad y para ello debe ser independiente sin estar al servicio del poder de turno.
Los políticos deben salir de su modorra sacudidos por el temblor del catastrófico discurso presidencial que hace temblar los cimientos de la Nación.
Los hombres de prensa que se jactan de ser el "cuarto poder" deben dejar de lado sus intereses para defender el bien común.
Los abogados deben expresar todos su repudio ante la actitud del Ejecutivo.
Vivimos en un país cada día más violento e inseguro, los delincuentes se han adueñado de las calles y se las disputan a tiro limpio provocando muertes inocentes, el presidente nos quiere hacer creer que el pueblo está preocupado por una guerra civil ocurrida hace treinta años y no por el presente.
Una preocupación que a Kirchner parece haberle nacido cuando asumió su cargo presidencial, ya que mientras fue gobernador de Santa Cruz durante muchos años jamás tuvo siquiera un tiempo de recuerdo para quienes ahora parecen ser la razón de su vida.
No es difícil entender sus olvidos ya que parece haber borrado de su memoria el haber sido mandatario en la mentada "década infame", haber apoyado políticas económicas que ahora defenestra.
Su olvido mayor es que ocupa el máximo cargo institucional de la República Argentina y que debe gobernar para todos los argentinos sin intrometerse en los otros poderes, respetando la Constitución Nacional.
Hoy debemos recordárselo con nuestras protestas, mañana con los votos.